Desde hace años, muchos estudios científicos han sugerido que un exceso de azúcares en la alimentación conlleva serios problemas para nuestro organismo. Cada vez, los profesionales de la salud nos encontramos con más casos de obesidad y sobrepeso relacionado con un exceso de azúcares en la dieta habitual. Además, aparecen con más frecuencia casos de diabetes mellitus en niños y adolescentes como consecuencia de una mala alimentación, con alimentos insanos que contienen una excesiva cantidad de azúcares.
El azúcar es una de las sustancias más consumidas en nuestra alimentación y prácticamente todos los productos que encontramos en nuestra cesta de la compra contienen una gran cantidad de éste.
Hace años, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendaba en nuestra alimentación que los azúcares de nuestra dieta no excedieran del 10% de las calorías totales, pero a causa de todos los problemas de salud que está causando el exceso de azúcar, la OMS ha recomendado que el azúcar suponga menos del un 5% de la energía diaria que consumimos en forma de calorías.
Estos azúcares de los que hablo son los llamados “azúcares libres” que están presentes en la bollería, bebidas azucaradas y el resto de productos procesados, y no hay que confundirlos con los azúcares que contienen los ‘alimentos reales’ como frutas y verduras, ya que éstos son muy beneficiosos en nuestra alimentación.
No es necesario, ni es indispensable, tomar ninguna cantidad mínima de “azúcares libres”, pero esto no quiere decir que les tengamos que eliminar totalmente de nuestra alimentación, sino que lo mejor es reducirles todo lo que podamos. Estos “azúcares libres” no hay que confundirles con la necesidad que tenemos de tomar hidratos de carbono en nuestra dieta, como por ejemplo, los cereales. Los hidratos de carbono son necesarios para que nuestro cuerpo produzca energía. Eso sí, tómalos con moderación.